Ten presente que si un vehículo recibe el adecuado mantenimiento seguramente su vida útil y rendimiento aumentarán, por ello hoy te contamos los cuidados básicos que debes tener con las ruedas, batería, luces o farolas y los frenos.
- Primero hablaremos de los cuidados con las ruedas, se deberá mantener la presión del aire recomendada por el fabricante. En los casos de baja presión, los neumáticos se desgastan de manera desigual provocando el aumento en el consumo de combustible. En caso contrario, es decir, si la presión es superior, se podría percibir un leve aumento en ahorro del combustible, pero la menor adherencia al pavimento reduce el trazo de frenado del vehículo pudiendo ocasionar un accidente. Es importante realizar esta revisión de la presión de aire por lo menos una vez al mes o cada que debas realizar recorridos largos.
- Respecto al cuidado de las Baterías debes tener en cuenta varios aspectos para que su rendimiento sea óptimo. Estas funcionarán de manera adecuada si se encuentran a temperatura ambiente, pero si son expuestas a situaciones climáticas extremas, su funcionamiento se verá afectado.
Un segundo aspecto fundamental es el uso de los dispositivos como el radio, el aire acondicionado y las luces, ya que estos consumen una cantidad de energía considerable, sobre todo cuando el vehículo no está encendido. Esto genera una descarga mucho más rápida de la batería, y por consiguiente, una disminución drástica de la perdurabilidad. Por último, conducir en trayectos muy cortos de menos de 10 minutos al día, podría generar un desgaste en la batería, ya que para que esta se recargue, hacen falta al menos diez kilómetros de recorrido.
- Las farolas son elementos de seguridad vital, por ello requieren una limpieza constante, ya que el polvo puede reducir la intensidad de la luz, lo que resulta altamente peligroso. Ten en cuenta las siguientes prácticas cuando se trata del mantenimiento de tus luces.
- Las luces o bombillas deben reemplazarse en pares, si combinas una nueva bombilla con una vieja podrías crear un campo desigual de visión.
- Revisar el funcionamiento de altas y bajas, para tener una excelente visibilidad, dependiendo el trayecto a realizar.
- Los frenos igual que las piezas nombradas anteriormente requieren de un cuidado y limpieza especial. Entre los cuidados se encuentran:
- Revisar el líquido de frenos cada dos meses, que se encuentre en su nivel adecuado.
- Es recomendable revisar el estado de las pastillas y bandas de los frenos por lo menos cada quince mil kilómetros, con el objeto de evitar rayar los discos o tambores por desgaste excesivo y en consecuencia el proceso de reparación sea más costoso.
- Al momento de llenar el depósito, éste deberá ser reemplazado por líquido de frenos nuevo, para evitar daños en el sistema y una mala calidad en el frenado.
- Si al momento de usar el sistema de frenos nota una vibración, podría que los discos se encuentran desgastados y deberían ser revisados o reemplazados.
- Si pasas por un estancamiento de agua, y los frenos se mojan, tendrás que disminuir la velocidad bombeando poco a poco el pedal para que las pastillas o bandas se sequen y consigas un frenado normal.
Recuerda siempre realizar modificaciones y revisiones bajo supervisión del personal calificado y especializado, de esta manera puedes evitar daños mayores y sobre todo accidentes. Además, recuerda que muchas de las piezas que necesitas para que tu vehículo funcione de la mejor manera, las puedes encontrar en nuestra página web recibiendo siempre una asesoría personalizada.